La roja insignia del valor
—ATENCIÓN CUARTEL SALTO DE LOS
ROSAS, QSL?
—QSL, FUERTE Y CLARO, CAMBIO.
—SE DECLARÓ INCENDIO FORESTAL
EN MONTE COMÁN, EN RUTA 146, 5 KM. ANTES DEL PUEBLO.
—YA NOS MOVILIZAMOS, CAMBIO Y
FUERA.
L
|
a
tranquila monotonía de aquella guardia de sábado en el cuartel, ubicado en el
viejo galpón ferroviario sobre la calle Vélez Sarsfield, se vio drásticamente
interrumpida por esta breve, pero electrizante, comunicación. El mate recién
cebado quedó sobre la mesa, mientras se avisaba a los voluntarios que
concurrieran a la emergencia, y se alistaban las dos 4x4 equipadas con las
bombas de agua, de 700 litros de capacidad cada una.
—Ese día, el 22
de noviembre, sí que la pasamos fea: tres incendios en un solo día —acota
el comandante del Cuerpo de Bomberos Voluntarios de Salto de las Rosas, Pablo
Franciulli. Y agrega: Llegamos a Monte
Comán antes que la brigada de allá; y estábamos trabajando, cuando nos vuelven
a llamar para que acudamos a San Rafael: se habían declarado dos incendios, uno
en calle Los Sauces, y el otro en Adolfo Calle, por El Cerrito.
La cantidad de emergencias atendidas por el Cuerpo
entre enero y agosto de 2014, arrojó un total de 189 intervenciones; un
promedio de seis a la semana, menos de una por día.
—Ojalá fuera tan
así; hay días y días en que no pasa nada, y de repente, se juntan varias...
nuestra área de cobertura, determinada
por Defensa Civil, es de 490 km2. Y además, tenemos que asistir también cuando
nos llaman fuera del área, como ocurrió el día 22. —aclara Franciulli.
Historia de
un cuartel
Bomberos Voluntarios de Salto de las Rosas fue fundado
el 28 de agosto de 2008, por un grupo de personas que contaba con el apoyo del
comisario local. No obstante, esa buena voluntad se fue agriando por las
constantes disputas internas, hasta que la mayoría de sus miembros originales
se fue dispersando.
Los tres que quedaron, lograron poco a poco ir
constituyendo el Cuerpo; consiguieron poner en regla la personería jurídica y
armar la comisión directiva, de la cual Franciulli fue elegido presidente.
Luego tramitaron y consiguieron su afiliación a la Federación Mendocina de
Bomberos Voluntarios, adherida al Consejo Nacional de esas instituciones.
Con esos títulos, accedieron al primer subsidio, que
utilizaron para reacondicionar el viejo galpón ferroviario que hoy ocupan,
armar la estructura del Cuerpo, y comenzar a equiparse. Una Land Rover 4x4
abandonada por Policía fue cedida en comodato al Cuartel; se invirtió dinero en
repararla, y constituyó el único móvil hasta que, con otro subsidio, pudieron
comprar en 2014 la segunda unidad: una Ford Ranger 4x4 usada.
El apostolado
de los voluntarios
Jonathan Olivares junto a la autobomba, un domingo de guardia. Los voluntarios dedican sus días francos al Cuerpo. |
El concepto de voluntariado que anima al Cuerpo, toma
forma de apostolado para sus integrantes: —Si
nos pagaran un sueldo, se caería la formación del voluntario, porque esto es
una búsqueda personal; algo interior que te impulsa a trabajar por la
comunidad. Cobrar un sueldo, mataría ese espíritu, dice Franciulli.
Y es cierto; los voluntarios continúan su labor
siempre, sin retribución personal alguna, y viven de otros trabajos y
ocupaciones. Franciulli hace changas en la construcción, y alquila su equipo
electrógeno cuando hay corte de luz; otro bombero, Jonathan Olivares, trabaja
en el céntrico Hotel Tower.
Este sacrificio marca una diferencia con los bomberos
rentados de Monte Comán y General Alvear, por ejemplo, los cuales en julio de
este año apagaron incendios únicamente de 8 a 14 hs., en reclamo “del reintegro del
adicional que les pagaban para estar en guardia todo el día”. (Cuyonoticias, 18-7-2014).
Estas palabras no implican un demérito
hacia los rentados, sino que pone en perspectiva el sacrificio de los
voluntarios, a quienes se les opone todo tipo de obstáculos en su tarea social.
Una
flagrante injusticia
Uno de ellos —acaso el más importante— es
que, si bien el artículo 21 de la ley provincial 7679 dispone una importante
partida de dinero para las necesidades operativas de los Bomberos Voluntarios (equivalente
al 50% de la acordada para Bomberos de Policía), el cuartel de Salto de las
Rosas sólo percibe la irrisoria cantidad de 200 litros mensuales de combustible;
dato que arroja sombras sobre el manejo del presupuesto que hace el director de
Defensa Civil, comisario general (RE) Marcelo Dapas.
O los obstáculos burocráticos para acceder
a la obra social OSEP, otorgada mediante el artículo 25 de la mencionada ley: “ningún
bombero de este cuartel la pudo obtener; te ponen tantas trabas, y te dan
tantas vueltas, que te cansan. Varios de acá lo intentaron, y terminaron
desistiendo”, aporta Franciulli.
Otro ítem es el hecho de que los Bomberos Voluntarios,
que no reciben ninguna clase de ingresos económicos —excepto los esporádicos
subsidios, y una módica suma que aporta la Municipalidad—, tengan que pagar
como cualquier vecino, industrial o comerciante, servicios esenciales para su
funcionamiento como el agua y la electricidad.
Esto lleva a la absurda situación de que EDEMSA
y la Cooperativa del agua, que facturan importantes cifras mensuales, tengan a
su disposición el servicio gratuito de bomberos en caso de siniestro; pero que
éstos tengan que pagar, religiosamente, sus cuentas a fin de mes si no quieren
que se vea cortado el suministro.
Consultado al respecto el doctor Juan
Carlos Giordano, referente local de la Cooperativa Rural de Servicios Públicos
Salto de las Rosas Ltda., manifestó a este medio que “la cooperativa tiene socios, y sus estatutos no contemplan excepciones”;
y que “en razón del servicio que brinda,
se está viendo de dónde obtener recursos para reparar el tanque de agua del
ferrocarril, de modo que sirva de contenedor al agua para incendios, y de donde
el Cuartel podría surtirse de agua potable”.
Sobre este último punto, el jefe
Franciulli acotó que “lo hablamos con el
doctor Giordano, y nos pidió que armáramos un proyecto; que hizo nuestro
compañero Luis, que además de bombero, es ingeniero. Consiste en hacer las
transversales, y enfundarlo por dentro con fibra de vidrio”.
Situaciones
extrañas y ambiguas, que ponen en riesgo vidas y bienes
El comandante Franciulli explicó a Una Voz de Cañada Seca los pormenores de
una extraña y ambigua situación, que el Cuartel viene viviendo desde un tiempo
a esta parte.
Según su relato, la estructura del sistema
de emergencias está organizada de esta manera: los ciudadanos llaman al 911,
donde atienden operadores de la policía pertenecientes al CEO (Centro
Estratégico de Operaciones) zona Sur, que tiene su base en el centro de San
Rafael.
Desde allí se da la alerta a las unidades
del sistema, que pueden ser una comisaría de policía, ambulancias, bomberos de
la policía, o bomberos voluntarios; todo depende del lugar del hecho, y de las
unidades disponibles. Para ejercer con acierto esta coordinación, es necesario
tener un criterio racional tomando en cuenta múltiples variables, entre ellas
las distancias a recorrer.
No obstante, desde el 11 de mayo de 2014,
algo comenzó a funcionar mal. La primera situación extraña se dio cuando
ocurrió un accidente en la ruta 143, km. 503, en la zona de El Tropezón: —fue un accidente fatal —relata
Franciulli—; el auto de esos tres chicos
funcionaba con GNC, se prendió fuego, y se vieron envueltos en llamas. Uno de
ellos, era primo de nuestro voluntario Jonathan Olivares. Murieron todos. Y
nunca nos avisaron a nosotros... que estamos a cinco minutos de distancia,
podíamos haber llegado de inmediato... los familiares preguntaban por qué no
fuimos, los medios nos llamaban... fue desastroso”, rememora.
Esta inexplicable falta de comunicación se
repitió el 19 de junio, cuando volcó el tractor de Antonio Martínez Delgado, en
su finca cercana al supermercado Átomo —a sólo dos kilómetros del Cuartel—,
falleciendo diez días más tarde.
—Nosotros
nos enteramos después por Internet... —explica, con un dejo de amargura,
Franciulli; quien, una tarde de octubre, cuando participaba de una reunión de
los Vecinos por la Comunidad de Cañada Seca, fue increpado por una mujer en
estos términos: “¿por qué no fueron
cuando se le cayó el tractor a mi cuñado?
— Es
muy difícil dar explicaciones a una persona enojada, y con justa razón. ¿Cómo
explicarle que el CEO no nos llamó a nosotros, contarle cómo está estructurado
el sistema de emergencias? Imposible... Y ya era la segunda vez que nos hacían
este cuestionamiento. Y se pone difícil cuando es así; porque somos la cara
visible de los Bomberos ante el barrio. Nosotros vivimos aquí, somos vecinos;
vamos a la verdulería, a la estación de servicio... —explica Franciulli.
A partir de estos dos hechos, y en prevención
de la repetición de una situación similar, los bomberos del Salto compraron un
teléfono celular propio, el 0260-469-0009; y mandaron a hacer volantes
dirigidos a la población, anunciando la nueva vía de comunicación.
Los casos anteriores bien podrían haber
sido errores de coordinación del CEO; pero el problema volvió a repetirse poco
después, el 2 de agosto, en ocasión del incendio en las cercanías de Lavaque,
en la Ruta 165, distante apenas seis kilómetros del Cuartel.
Había viento Zonda, y las llamas
alcanzaron hasta 15 metros de altura. Diario Uno (2/8/2014) destacó que “El rol que
jugaron los bomberos voluntarios de Salto de Las Rosas fue clave para impedir
que el siniestro se convirtiera en una tragedia”. Pero los bomberos se enteraron del siniestro
por el llamado directo de un vecino, al cual le había llegado el volante; el
CEO nunca los convocó.
No obstante, esta ambigua situación no
terminó aquel día: el martes 18 de noviembre, Bomberos recibe un llamado de
alerta por un siniestro en calle 5 y 143: —eso
es en Villa Atuel —relata Franciulli— y
nos movilizamos de inmediato; y cuando estábamos en camino, nos llaman de nuevo
y nos dicen que no, que la ubicación es 5 y 143 de El Tropezón. Pegamos la
vuelta, y nos fuimos para allá... en verdad que íbamos rezando todo un rosario,
por la bronca... y cuando llegamos, ya estaban actuando los bomberos de
policía, con el apoyo de dos patrulleros.
Y como corolario de esta increíble zaga,
ocurrió el incendio de Monte Comán, con el cual comienza esta nota. En lugar de
llamar primero a la dotación de bomberos de policía existente en dicha
localidad, que está fuera de jurisdicción de los bomberos del Salto, el CEO
llamó a la Comisaría 42a., que retransmitió el alerta a los Voluntarios.
Y cuando estaban en plena tarea, vuelven a
ser llamados para movilizarse de urgencia a extinguir dos incendios en la
ciudad, zona también ubicada fuera de su área de cobertura.
El
huevo de la serpiente
Consultado respecto del motivo por el cual
habrían ocurrido estos incidentes, que ponen en grave riesgo vidas y bienes de
los vecinos, el Comandante dijo: —Nosotros
tenemos una excelente relación de cooperación con casi todo el mundo: el intendente
Emir Félix, el Comando Radioléctrico, el subcomisario Manquepi de la 42a., los
bomberos de policía... pero sí creo que hay lineamientos bajados desde algún
lado para llamarnos tarde, o no llamarnos.
A raíz de todos estos hechos, el
comandante Franciulli tuvo duras palabras para con Aldo Sarmiento, director
local de Defensa Civil, y con el subcomisario Pablo Gustavo Blangero, jefe del
CEO zona Sur.
No
obstante, éste último causó buena impresión en el comandante; hacía poco que
estaba a cargo del CEO, y la discusión inicial se transformó en una
conversación, en la cual primó el deseo de mutua colaboración: —“me explicó que él tenía otro tipo de
directivas: que para alertar a los Bomberos Voluntarios, tenía que pasar
primero por las comisarías, y éstas filtraban o no filtraban, llamaban o no
llamaban”. —dijo.
En este punto, es necesario recordar que
el anterior jefe del CEO zona Sur, comisario Carlos Mir, fue removido de su
cargo y trasladado a Godoy Cruz, tras una denuncia por abuso de autoridad
(Diario San Rafael, 5/7/2014) que revela las poderosas internas policiales.
Blangero había heredado las directivas del comisario Mir, y ésta podría ser una
de las causas de la ambigua situación.
No obstante ello, ante la duda y hasta que
el funcionamiento del CEO se ajuste adecuadamente, Franciulli recomienda “llamarnos primero a los Bomberos Voluntarios,
e inmediatamente después al 911; la seguridad de los vecinos, está ante toda
otra consideración”.
Necesidad
de nuevos equipos y mayores insumos
Cuando se formó el Cuartel, la prioridad
era actuar sobre los incendios en los campos, rubro en el cual los Bomberos
Voluntarios han logrado un alto nivel de eficiencia; pero en pocos años, el
distrito se fue urbanizando —con el natural aumento del consumo de energía—,
hasta alcanzar una complejidad que plantea nuevos desafíos, y requiere una
actualización del equipamiento.
La temporada crítica se da en los meses de
invierno, cuando hay menos agua a causa de la emergencia hídrica; se incendian
más viviendas, por uso indebido o fallas en el sistema de calefacción de las
casas, o por picos de tensión del sistema eléctrico.
Las necesidades más apremiantes de los
Bomberos Voluntarios, se pueden sintetizar en los siguientes puntos:
—Mayor cuota de nafta para las autobombas,
dado que la actual no alcanza, a pesar de que la Municipalidad la duplica
durante el período invernal.
—Instalación de un sistema de paneles
solares para acumular energía eléctrica en baterías, que brinde iluminación y
funcionamiento de las radiocomunicaciones los días de corte de luz.
(Actualmente se utilizan equipos electrógenos nafteros, cuyo enorme consumo de
combustible afecta el uso de las autobombas).
—Reparación de dos equipos de radio, que
están fuera de servicio por no conseguirse repuestos en el país.
—Reparación y puesta en funcionamiento del
tanque de agua de la antigua estación ferroviaria, que permitirá disponer
de un reservorio de 60.000 litros.
—Un camión autobomba 4X4, de tipo forestal.
Las autobombas en uso (17 años de antigüedad), están próximas a ser declaradas obsoletas; y la experiencia de
incendios como los de Lavaque y Monte Comán, indican la necesidad de contar con
un móvil rápido y liviano, de gran versatilidad, con una cisterna de agua de
gran capacidad, que pueda desplazarse ágilmente a través de los campos.
El modelo Renault D14 CCR 270 4x4, con capacidad de 3.200 litros, ha resultado
muy positivo para los Bomberos de Chile, que deben
operar en casas ubicadas sobre las laderas de las montañas, según observa el
comandante Franciulli.
—Incorporación de nuevos voluntarios en el
Cuerpo: la dotación actual, de 14 personas —entre las cuales se cuentan tres
mujeres—, resulta insuficiente para completar las guardias, debido a las
ocupaciones laborales de cada una de ellas; y dificulta, por falta de tiempo,
la realización de estudios necesarios como el Plan de Emergencias en
Contingencia de Sismos y Aluviones para Cañada Seca, actualmente en un lento
proceso de elaboración.
Una
iniciativa solidaria: el Súper Prime a beneficio de los Bomberos Voluntarios de
Salto de las Rosas
Bajo el lema “Ayudemos a quienes nos ayudan”, el pasado 7 de diciembre se realizó
esta interesante actividad en el predio del Cuartel, organizada en conjunto con
el Club Ika San Rafael y la División Jeep Salto de las Rosas; cuyos
miembros demostraron su pericia al volante, maniobrando en una pista de 2.400
metros de extensión, plena de bateas embarradas, y de todo tipo de obstáculos y
pozos. Luego de una agotadora jornada de marchas y contramarchas, fue coronado
ganador el equipo compuesto por los pilotos Gustavo Rebolloso y Eduardo Nifosi.
De lo recaudado en la cantina, el Cuartel
pudo comprar tres máscaras de protección para incendio forestal, a un costo de
1.700 pesos cada una; dato que permite calificar al evento, como exitoso.
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